Días después, Uribe-Echevarría, el ingeniero Sr. Buesa y el contratista Sr. Uriarte, visitaron los terrenos donde se iban a iniciar las obras para la instalación de una presa, y con ella la playa artificial para adultos, a la que se quiere también unir un embarcadero, porque el concejal de deportes tenía un proyecto, tras haber visto en otros lugares como funcionaba idea similar. Y se quería que el proyecto de la playa artificial de Gamarra entrara en funcionamiento el año siguiente, o sea en el verano de 1960. Pero la presa se inauguró el 14 de agosto de 1959. Para dar mayor facilidad a los muchísimos vitorianos que se trasladaban a Gamarra, se montó un servicio especial de ferrocarril Vasco-Navarro con salida del mismo cada hora. También se había montado en la playa de Gamarra un servicio de bar, el cual fue adjudicado previa subasta a "La Mondragonesa" por haber mejorado con 15000 pesetas otra proposición que pujaba con 2000 pesetas menos. La concesión era por un año. Las características de aquella playa artificial estaban gobernadas por un puente de 30 metros de longitud de un lado a otro del rio y que su constructor D. Mauricio Uriarte había avalado la obra. El puente tenía varias compuertas que al permanecer cerradas permitía el embalse del agua hasta una altura de 1,40 metros. Esta dimensión podía regularse cerrando y abriendo las compuertas.
También se instalaron casetas de duchas y cabinas para cambiarse de ropa, que eran vigiladas por los empleados del Ayuntamiento, que el mismo se encargaba del servicio de las seis piraguas que se pusieron en el embarcadero y que estaban pintadas con los colores de la bandera de Vitoria. Las piraguas podían ser alquiladas por los usuarios. Pero el Sr. Uribe-Echevarria tenía proyectos de mayor categoria. Hablaba de playas artificiales para dar facilidades a la gente de condición humilde. Proyectaba el concejal de deportes, comprar terrenos a ambos lados del rio y construir un puente que uniera ambas orillas en las que nacerían unas grandes explanadas con árboles, piscina...¡en fin!, tal como después se pudieron apreciar el día que el General Franco inauguraba las magníficas instalaciones de Gamarra aquél 30 de julio de 1964, siendo Alcalde de la Ciudad D. Luis Ibarra Landete, que siempre apoyó y secundó la magnífica idea de su concejal.
